Un pobre rezaba, consciente de su pobreza. Le decia a Dios.
«No soy digno, Jesus de entrar en tu Reino, pero por tu Misiericordia, sé que no puedes cerrarme la puerta. no te pido otra cosa que el ultimo lugar».
Entonces escucho la respuesta de Jesùs:
« Muy bien, te concedo el ùltimo lugar, asi estaras junto a mi Madre».
Comentarios
Publicar un comentario
A la hora de expresarse tengamos en cuenta la ley de la Caridad