ES TIEMPO DE CONVERSION
En el
tercer domingo de Cuaresma, el
de este 28 de febrero, el Papa
Francisco recordó
a los fieles el verdadero significado de la Cuaresma al presidir el Ángelus y
les invitó a convertirse con la mirada fija en la paciencia de Dios.
Al encontrarnos en un “año de gracia”, el Santo Padre destacó
“el ministerio de Cristo, el tiempo de la Iglesia antes de su regreso glorioso,
el tiempo de nuestra vida, que está marcada por una serie de Cuaresmas que nos
son ofrecidas como ocasión de arrepentimiento y salvación”.
Aludiendo a la paciencia de Dios, el Santo Padre aseguró que “nunca
es tarde para convertirse, ¡pero es urgente, es la hora!”,
según informa Aciprensa.
Francisco, como es habitual, comentó las lecturas de la liturgia
del día y se refirió también a los terribles sucesos y tragedias que acontecen.
“Cada día, por desgracia, las crónicas reportan noticias feas:
homicidios, incidentes, catástrofes… en el pasaje del Evangelio de hoy, Jesús
se refiere a dos acontecimientos trágicos que en aquel tiempo habían suscitado
un gran revuelo: una represión cruenta a manos de los soldados romanos en el interior
del templo; y el derrumbe de la torre de Siloé, en Jerusalén”.
Una
interpretación equivocada
El Papa explicó que “Jesús conoce la mentalidad supersticiosa de
aquellos que le escuchan y sabe que interpretan ese tipo de acontecimientos de
modo equivocado”. Creen que “esos hombres que han muerto han sido castigados
por Dios”.
Sin embargo, Jesús “rechaza esta visión porque Dios no permite las tragedias para castigar las culpas, y
afirma que aquellas pobres víctimas no eran peor que los otros”. Incluso les dice:
“Si ustedes no se convierten, morirán de la misma manera”.
“También hoy, frente a ciertas desgracias y eventos de luto,
puede venir la tentación de ‘descargar’ la responsabilidad sobre las víctimas,
o incluso sobre el mismo Dios”, alertó Francisco.
“Pero el Evangelio nos invita a reflexionar: ¿qué idea nos hemos
hecho de Dios?, ¿estamos convencidos de que Dios es así o no es más que una
proyección nuestra, un dios hecho ‘a nuestra imagen y semejanza’?”.
“Cambiar
el corazón
El Pontífice recordó entonces que Jesús “nos
llama a cambiar el corazón, a hacer una inversión radical en el camino de
nuestra vida, abandonando los compromisos con el mal, las hipocresías, para
tomar decididamente el camino del Evangelio”.
A su vez, pidió a los fieles que no intenten justificarse porque
“cada uno de nosotros se parece a un árbol que durante años ha dado múltiples
pruebas de su esterilidad”, como narra la parábola del Evangelio del día.
“Que la Virgen María nos sostenga, para que podamos abrir el
corazón a la gracia de Dios, a su misericordia; y nos ayude a no juzgar nunca a
los otros, sino a dejarnos provocar por las desgracias cotidianas para hacer un
serio examen de conciencia y arrepentirnos”, concluyó el Papa.
Publicado en Forum Libertas
Comentarios
Publicar un comentario
A la hora de expresarse tengamos en cuenta la ley de la Caridad