QUE JESUS LOGRE VER A LOS SUYOS UNIDOS

“Ha de ser así, que por lo menos en los últimos tiempos del mundo, Jesús logre ver a los suyos unidos, formando un solo Corazón con El y un solo espíritu, una sola alma con El.

Todos consumados en unión y el mundo reconociendo la divinidad de Jesús y su misión, por ver lo que, como es ya bien evidente, no puede obtenerse mas que con la existencia de algo divino misterioso, aglutinante espiritual, lo cual no puede ser mas que este Corazón, del cual tanto necesita el mundo que se le hable:

Maestro de sacrificio y por tanto de verdadero Amor;

Maestro de dulzura y mansedumbre humilde.

Oh, el Corazón de Jesús tiene que reinar, fundiendo, uniendo, consumando la unión por la que tanto suspiro durante su vida mortal, como se entiende por el último desahogo, en aquellos momentos en los que tienen que brotar los afectos más íntimos, en la Cena, después de haber hecho el milagro del aglutinante divino: la Eucaristía. “Padre santo, guarda a los que me diste, por tu nombre, para que sean una sola cosa. Como Tu en mi y yo en Ti...” P. Vallet 16 febrero 1928